Metro de Nueva York

Metro de Nueva York

El metro de Nueva York fue inaugurado en 1904 y es el metro más extenso de Estados Unidos, además de uno de los más grandes del mundo. Tiene casi 500 paradas y más de 1000 kilómetros de vías.

Si tenemos que poner alguna pega al metro de Nueva York, esa es su estado, la mayor parte de las estaciones son pequeñas, agobiantes y se nota que tienen bastantes años. Por otro lado, la limpieza no es de las mejores y ver ratas es algo bastante habitual.

Líneas de metro

El metro de Nueva York tiene 28 líneas cuyos nombres pueden ser letras o números. Conectan cuatro de los cinco distritos de la ciudad: Manhattan, Brooklyn, Queens y el Bronx, pero no Staten Island. 

Tarifas

El precio de un billete sencillo del metro de Nueva York son 2,90 US$. Si tenéis previsto utilizar el transporte público con frecuencia, es recomendable pagar con OMNY, ya que a partir del 12º viaje la tarifa semanal será de 34,80 US$. Hasta finales de 2024, todavía podrá usarse la tarjeta MetroCard, válida para el metro y los autobuses.

Horario

Tanto el metro de Nueva York como los autobuses están operativos las 24 horas del día. Por la noche no todas las bocas de las estaciones están abiertas ni tampoco encontraréis operarios a altas horas.

Frecuencia

De forma general, la frecuencia de los trenes del metro de Nueva York oscila entre los 2 y los 5 minutos en las horas puntas (de 6:30 a 9:30 y de 15:30 a 20:00 horas), entre los 5 y los 10 minutos al mediodía, y entre los 5 y los 15 minutos hasta medianoche.

Desde la medianoche hasta las 6:30 horas, la frecuencia es de aproximadamente 20 minutos.

Cómo usar el metro de Nueva York

El metro de Nueva York tiene una particularidad, y es que las distintas bocas de la misma parada tienen distintos sentidos, es decir, en muchas calles si entras por la boca de una acera vas al norte (uptown), y por la de la otra al sur (downtown). Os recomendamos mirar el sentido antes de bajar al metro para no tener que volver a salir a la calle, si pagáis y luego os dáis cuenta de que os habéis equivocado, os tocará pagar de nuevo.

Además de la dirección y la boca de entrada, otra cosa que debéis tener en cuenta para entender cómo funciona el metro de Nueva York es que varias líneas pueden compartir una misma vía. Es decir, puede que estés en el andén y por tu vía pase un tren, pero que no sea la línea que tú estás esperando. Así que, antes de subirte, fíjate siempre en el nombre o la letra del convoy o presta atención a la megafonía o a los carteles que hay en la estación.

Otro detalle importante es saber que existen dos tipos de trenes: normales y express. Los trenes express no paran en todas las estaciones y son mucho más rápidos, por lo que son muy útiles para recorrer largas distancias.